Las Armadas de China y Rusia comenzaron el lunes unas maniobras militares conjuntas en el mar de la China Meridional con Estados Unidos y Filipinas en el punto de mira.
El Ministerio de Defensa chino anunció el inicio de las maniobras, que se desarrollan a lo largo de tres días en aguas alrededor de Zhanjiang, en la provincia de Cantón, en el sur del país. Según esta autoridad, la flota participante se compone de un destructor equipado con misiles y dos fragatas; el objetivo es unificar el mando de las dos fuerzas.
El mismo lunes, el Ministerio de Defensa ruso comunicó que dos corbetas de la Flota del Pacífico se unirían a las maniobras, y explicó que las dos Armadas llevarán a cabo ejercicios de defensa antiaérea, antisubmarinos y de otro tipo.
En mayo, los presidentes de ambos países se reunieron en Pekín. Xi Jinping y Vladímir Putin firmaron una declaración que incluye el fortalecimiento de la cooperación militar con medidas tales como la ampliación de la escala de las maniobras militares conjuntas.
Estos ejercicios de China y Rusia coinciden con la intensificación de la participación de Estados Unidos en el mar de la China Meridional. Uno de los objetivos de Pekín con estas maniobras podría ser ejercer presión sobre las Filipinas en aguas en las que ambos países mantienen disputas territoriales.