Una botella de güisqui de fabricación japonesa se vendió por más de 370.000 dólares en una subasta en Londres.
Sotheby's sacó a subasta el viernes 271 botellas de güisqui japonés poco común para conmemorar el centenario de la construcción de la primera destilería de Japón.
"Karuizawa 1960", elaborado por un destilador de la ciudad homónima de la prefectura de Nagano, obtuvo la oferta más alta, 300.000 libras, o aproximadamente 373.000 dólares.
Su rareza aumentó su valor, dado que la destilería ya no existe. También es muy reconocido por la gran riqueza de su sabor y se ha comercializado a precios elevados.
El güisqui subastado tiene 52 años. Sólo 41 botellas de la misma barrica se pusieron a la venta en 2013.
Jonny Fowle, responsable mundial de bebida espiritosa de Sotheby's, afirma que a los coleccionistas les gusta especialmente el güisqui japonés oscuro añejado durante años en barricas de jerez.
La popularidad del güisqui japonés ha estado aumentando en todo el mundo.
El año pasado, una botella de otro güisqui de fabricación nipona se vendió en 600.000 dólares en una subasta en los Estados Unidos.