La Policía de la prefectura de Osaka, en el oeste de Japón, informó que el número de cuentas bancarias en poder de ciudadanos extranjeros usadas para perpetrar estafas telefónicas casi se ha triplicado en los últimos tres años.
La Policía señaló que los casos de fraude de este tipo han estado aumentando en la prefectura con más rapidez que nunca. Se identificaron 2.051 casos desde principios de este año hasta finales de septiembre. Los daños causados por estas estafas suman unos 18 millones de dólares.
Las autoridades detallaron que, de las aproximadamente 1.600 cuentas utilizadas para recibir dinero fraudulento, 312, o sea el 20 %, tenían nombre extranjero.
Sospechan que el aumento en el número de cuentas de no japoneses utilizadas con fines de estafa puede estar relacionado con la práctica ilegal de compra y venta de cuentas, que posiblemente involucre a estudiantes o aprendices extranjeros que parten de Japón. Según se informa, esas cuentas cambian de manos a través de las redes sociales por varios cientos de dólares cada una.
La Policía está redoblando esfuerzos para acabar con estas transacciones.